Palacio José Bonifácio
Foto superior: Tadeu Nascimento
Sede del ayuntamiento, el Palacio José Bonifácio homenajea a uno de los más ilustres santista, el Patriarca de la Independencia de Brasil. Con las estatuas de Mercurio y Minerva a la entrada, el edificio, construido en el periodo áureo del café, es una de las pocas edificaciones públicas de la Provincia de São Paulo que mantiene la estructura original y la más grande de la parte de la decoración preservada.
El inmueble está lleno de simbolismos, que remiten al pasado filosófico y a la importancia histórica de José Bonifácio de Andrada e Silva. Inaugurado en enero de 1939, tras dos años de obras, es la quinta sede del Poder Legislativo – y la primera en edificio propio. Ocupando un terreno con 2.847,15m², la edificación, con siete pisos, pesa cerca de 12 mil toneladas y fue construida con 2 millones y 50 mil ladrillos.
Arquitectura
El edificio, proyecto del arquitecto Plínio Botelho do Amaral, sigue el estilo ecléctico, con predominancia del neoclásico. Confieren belleza e imponencia los vitrales, escalinatas rodeadas de piedra labrada, arcos, grandes columnas, acabado en mármol de Carrara y jacarandá, lámparas de cristal de Bohemia, detalles en hierro y bronce, además de piezas escultóricas y frescos.
Foto: Anderson Bianchi
Fachada
Imagen de los dioses romanos Minerva (Palas Atenas, en la mitología griega) y Mercurio (Hermes) se encuentran a la entrada del edificio, flanqueando la escalinata. La primera, símbolo de la sabiduría, ciencia y arte, se encuentra a la derecha de quien entra en el edificio. A la izquierda, está la representación del dios del comercio. Ellas fueron confeccionadas en granito por José Baptista Ferri, que las donó a la municipalidad en 1941.
Foto: Isabela Carrari
Zaguán principal
El zaguán principal tiene el suelo revestido en mármoles italiano y portugués. En el mismo ambiente, además de la escalinata con pasamanos en bronce, están dos estatuas de 1939, en el mismo material, de autoría de Luiz Morrone: ‘El Desbravador’, representando los bandeirantes(precursores paulistas), y ‘El Catequizador’, en homenaje a los sacerdotes jesuitas. En lo alto de la escalinata, se encuentra el busto del patriarca José Bonifácio, confeccionado en fibra de vidrio por Daniel González e instalado en 1995.
Foto: Tadeu Nascimento
Salón Noble
Decorado en estilo Luis XVI, el Salón Noble posee nueve lámparas importadas, en cristal de Bohemia, y menaje en madera, pintado con hojas de oro. En el techo y contorno de las puertas, el estuco fue trabajado, representando follajes, frutos de café y delfines, reforzando el estilo francés. El suelo presenta trabajo en marquetería y los puntales de las cortinas son de porcelana inglesa Werdwood. En 1992, el Salón Noble recibió el nombre de Esmeraldo Tarquínio de Campos Filho, electo alcalde en 1967 y destituido por el gobierno militar antes de tomar posesión.
Foto: Francisco Arrais
Salón Princesa Isabel
Vitrales, frescos y cuadros cuentan un poco de la historia en el Salón Princesa Isabel, que de 1948 a junio de 2011 albergó sesiones y eventos del Concejo. Arriba de la bancada de la Mesa Directiva, se encuentra el cuadro de la Princesa Isabel, intitulado ‘La Redentora’, de Ângelo Cantú. En los laterales, sobre las puertas de acceso a la sala de espera, dos cuadros de Mimi Alfaia: a la izquierda, Martim Afonso de Souza y su expedición por la Isla de Santo Amaro, y, a la derecha, el Fuerte de São João da Barra.
En la entrada del Salón Princesa Isabel, a la derecha, hay una imagen de Martim Afonso de Souza, fundador de la Villa de São Vicente y, del otro lado, la de Braz Cubas, fundador de la Vila de Santos, ambas firmadas por R. Mertig. Él también es el autor de las pinturas en las paredes que reproducen los transportes marítimo y ferroviarios, que representan el puerto y la economía; la Agricultura, la diosa Minerva y la industria.
Aún en el Salón Princesa Isabel, impresiona también el conjunto de 12 lámparas, todas en cristal de Bohemia, con destaque para el central, con 2,90m de altura, 2m de diámetro y cerca de 300 kilos. ya los muebles del plenario, utilizado por los concejales, fueron confeccionados en madera caviuna(Machaerium scleroxylon), mientras que los de la galería son en ocotea (Ocotea porosa).
Foto: Francisco Arrais